Mariana Rodríguez, al igual que muchas mujeres, tuvo varios problemas para poder embarazarse. Pérdidas y desesperación, son algunos de lo sentimientos que ella misma confirmó que vivió. Sin embargo, después de muchos problemas, por fin pudo dar a luz a su hija Mariel. Entre todo lo que comparte de ella en redes sociales, hoy nos enseñó como le prepara un omelette de desayuno.
Estamos acostumbrados a ver a Mariana Rodríguez luciendo outfits increíbles, maquillaje hermoso y trabajando arduamente en sus empresas y más. Sin embargo, en esta ocasión nos enseñó que como cualquier madre preocupada por sus hijos, también es buena a la hora de hacerle el desayuno a su hija Mariel.
La protagonista de este acto culinario, un delicioso omelette que refleja la dedicación de esta madre influencer hacia la alimentación de su bebé y aquí te traemos su receta. Después de que la subiera a redes, varios fans la etiquetaron haciendo el mismo platillo para sus bebés.
Te podría interesar
El omlette que Mariana Rodríguez le da a su hija Mariel de 10 meses
Con la destreza de una experta, Mariana comienza echando dos huevos en la sartén, iniciando así un proceso de creación que va más allá de la simple preparación de alimentos.
Previo a que los huevos alcancen su punto de cocción ideal, Mariana añade un toque de frescura a la mezcla. Corta un jitomate en cuadros diminutos, aportando color y sabor a la experiencia gastronómica de Mariel. Este gesto revela la atención meticulosa de Mariana hacia la calidad y variedad de los ingredientes, incluso para su bebé de apenas 10 meses.
La sencillez de la receta es, de hecho, su encanto. Mariana, con gracia y experiencia, integra los jitomates a los huevos revueltos. La mezcla se fusiona en la sartén, cocinándose, sin embargo, cuando llega a un punto de cocción deseado, la influencer lo parte en pedacitos pequeños para que su hija pueda comerlos sin problema.
Este omelette, más que un platillo, se convierte en una expresión tangible del amor y compromiso de Mariana con la nutrición de Mariel. La receta, aparentemente simple, trasciende la mera función de proporcionar alimento y se convierte en un acto significativo de conexión emocional entre madre e hija.
En un mundo digital saturado de imágenes perfectas, este vistazo a la cotidianidad de Mariana Rodríguez destaca la autenticidad y el cuidado que impregna cada aspecto de su papel como madre. A través de sus habilidades culinarias y el acto de compartir este momento íntimo, Mariana inspira a sus seguidores a apreciar las pequeñas alegrías y gestos que hacen única la experiencia de la crianza.